Históricamente el liderazgo político dominicano, ha tenido una actitud constante de escuchar o ser sensibles a las demandas de la población casi exclusivamente cuando esa voz del pueblo se ha hecho sentir en sectores o en escenarios que alteran el clima de gobernabilidad.
Cuando existe amenaza del orden público o existen organizaciones de la oposición detrás de algún reclamo social con la intención de desestabilizar el gobierno y con claras orientaciones para incitar a la anarquía, es normal que se produzca una reacción de represión de esas actividades o movilizaciones.Leer mas...